A finales de los años noventa, la policía encuentra, en una casa de veraneo en el norte de Dinamarca, a dos hermanos adolescentes brutalmente asesinados. Han sido golpeados, torturados y violados sin compasión. La investigación policial apunta a que los culpables pueden hallarse entre un grupo de jóvenes de buena familia, hijos de padres exitosos, ricos, cultos. Sin embargo, el caso se cierra muy pronto por falta de pruebas concluyentes hasta que, pocos años más tarde, uno de los sospechosos se entrega sin razón aparente y confiesa el crimen. Supuestamente, el misterio se ha resuelto. Pero entonces ¿por qué los archivos del caso aparecen veinte años después en el despacho del inspector Carl Mørck, jefe del Departamento Q? Al principio Mørck piensa que el caso está ahí por error, pero pronto se da cuenta de que en la investigación original se cometieron muchas irregularidades…
Hola chic@s: Hace días que no entraba y la verdad es que lo echaba de menos. Cuando leí "El mensaje que llegó en una botella" quise seguir leyendo libros de este autor y los conseguí. Pero es que he empezado por el final de la serie de 3 que ha escrito y este es el segundo. Vamos, tenía un caos en la cabeza. Todo lo que yo sabía de ellos en el 2º aún no había pasado. Con respecto al libro he de decir que me ha gustado pero me ha cansado mucho la parte de los asesinos. Hasta bien entrada la novela no aparecen Morck y Assad que son el alma del libro, sus deducciones, sus líos en la comisaría, su vida en casa con el hijo de su ex y su realquilado Morten, su enamoramiento con Mona.... Por lo demás el libro está muy bien y el final no me lo esperaba. Y mira que yo acierto casi todos, pero esta vez no. Me encanta la novela negra escandinava.